Crece la inquietud en la ciudad por los cientos de estudiantes que inician el curso. Las aglomeraciones en el transporte público pueden constituir un peligroso foco de contagio; un punto caliente en un servicio que atiende a cientos de usuarios.
A pesar de que el transporte público no se relacione con los contagios, la comunidad universitaria ha expresado su inquietud porque puedan producirse aglomeraciones. Miguel Ángel (chófer de autobús) pone el acento en que el servicio coruñés cuenta con «un buen colchón, un buen margen, para que esto no suceda».
El dispositivo de movilidad diseñado por la Compañía de Tranvías fue consensuado con la propia UDC, bajo el paraguas de los datos facilitados por la Universidad sobre la demanda y la movilidad que esperan. «Hemos trabajado con ellos y seguimos en permanente contacto», asegura Miguel.
A partir de aquí, hay que destacar que el número de autobuses es el mismo que el año pasado y que su utilización, por la pandemia, bajará entre un 28% y un 30%. Así mismo, desde la Universidad indican que puede haber un escenario donde la mayor parte de sus clases sean telemáticas. A la caída de usuarios se ha unido un aumento de los costes. Se han invertido miles de euros en medidas anticovid.
Redacción.